Ante la destitución que hizo José Luis Hernández Vázquez, alcalde de Xaltocan, de sus elementos policiacos, ese municipio se quedó sin seguridad pública, pues el secretario de gobierno de Tlaxcala, Sergio González Hernández, señaló que las fuerzas estatales sólo esteran al pendiente, pero no están a cargo de la seguridad de la comuna.

Recordar que después de los hechos violentos ocurridos en ese municipio por la muerte de Quirino N., quien fue detenido por los policías municipales y posteriormente perdió la vida en los separos municipales, el alcalde tomó la decisión de despedir a sus elementos policiacos, pero no aclara en qué condiciones fueron separados del cargo.

En entrevista colectiva, el responsable de la política interna del Estado, aseguró que el gobierno del estado no ha asumido la responsabilidad de dar seguridad pública, aunque está vigilando la demarcación, además la investigación sigue abierta, por lo que aún no determinan cuál fue la responsabilidad de los elementos policiacos en esos hechos.

González Hernández mencionó que el alcalde tiene la obligación de dar seguridad a la población, “le dije que tiene que hacer una consideración en ello, que inclusive el personal de segundo turno que no estuvo presente ese día (cuando murió Quirino N.), debería invitarlo a trabajar”.

Sin embargo, el presidente municipal argumentó que todos los elementos policíacos son vecinos del municipio y algunos de ellos temen ser agredidos por pobladores, de ahí que separó a todos del cargo, además desconocen si los policías contaban con la acreditación para desempeñar sus funciones, pues solo tiene el dato de que no todos los uniformados de esta demarcación habían realizado el examen de control y confianza.

Respecto de la muerte de Quirino N., el secretario e gobierno sostuvo lo que informó la Procuraduría General de Justicia del Estado, en el sentido de que el dictamen de la autopsia reveló que la causa de muerte de esa persona fue un infarto, pero ambas instancias desconocen o no informan las causas de ese accidente cardiaco que tuvo la víctima.

“No hay razón para desconfiar en los resultados de la necropsia” practicada a Quirino N., por parte de la PGJE, pues aseguró que “está perfectamente apegada a todo el método y protocolo que se debe seguir en estos casos” y que está videograbada, para “dar un testimonio fiel de cómo se realizó”.