El Observatorio Ciudadano de Protección Animal (OCPA) evaluó el cumplimiento del trabajo de cinco dependencias del gobierno estatal, en materia de Bienestar Animal, en el periodo noviembre de 2022 a octubre de 2023, en el marco del segundo informe de gobierno de la titular del Ejecutivo estatal y los resultados arrojaron que los principales pendientes de la administración de Lorena Cuéllar son en educación y el cumplimiento a la legislación local.

El OCPA colabora con la organización hispanoamericana AnimaNaturalis, y su representación en México, para evaluar la Política de Protección y Bienestar de Animales de Compañía en el Estado de Tlaxcala.

El documento que detalla la evaluación señala que, en cuanto a la educación, las acciones pedagógicas a través de programas para fomentar en los alumnos una cultura de respeto y protección animal, solamente han alcanzado al 3.57 % de los estudiantes en el estado, de nivel preescolar a preparatoria, “un número en extremo bajo”. 

Añade que la Secretaría de Educación Pública del Estado debe dar cumplimiento al Artículo 7 Fracción I de la Ley de Bienestar Animal para el Estado de Tlaxcala. Y que el convenio de colaboración que signó en febrero de 2023 con la CBA dé resultados.

Por lo que, uno de los grandes pendientes del gobierno estatal es elaborar programas educativos para que, en las escuelas, desde una temprana edad, se enseñe a los alumnos y concientice del respeto a la vida de los animales, en la búsqueda de erradicar actos de maltrato o crueldad hacia los animales.

Asimismo debe realizar políticas públicas en cuanto a la prevención del maltrato animal, ya que es la antesala de la violencia social. “La violencia comienza siempre por el más indefenso y en este caso son los animales, escalando a niños, mujeres y adultos mayores”. 

Además de prevenir el maltrato animal, los casos que se registren y/o denuncien, se deben sancionar y buscar la readaptación del infractor. De ahí que el gobierno debe invitar a las universidades para que, junto a sus estudiantes, participen de manera conjunta en la elaboración de políticas públicas en esta materia. 

Involucrar a los estudiantes en la búsqueda de soluciones, que puedan realizar su servicio social en las dependencias encargadas del tema, de las licenciaturas como sociología, psicología, pedagogía, derecho, por mencionar algunas.

En la evaluación de la Coordinación de Bienestar Animal (CBA), el OCPA señala que, si bien es cierto que la Ley de Bienestar Animal para el Estado de Tlaxcala da facultades a esta dependencia, estas son de un espectro muy reducido, priorizando rescatar a animales en situación de abandono. 

Esa medida es inviable, porque se estima, de manera extraoficial, que solo 3 de cada 10 perros tienen un tutor; de acuerdo a la ENBIARE del INEGI, 518 mil 155 perros en Tlaxcala lo tienen (en el caso de los gatos, la cifra es de 198 mil 593). No hay un albergue en el mundo capaz de recibir a los animales que no tienen un tutor.

Por tal motivo, la CBA debe asumir su responsabilidad, para que conforme a lo que establece el Artículo 21 de la Ley Orgánica de la Administración Pública del Estado de Tlaxcala, formule el proyecto del Reglamento del Consejo Consultivo Estatal de Bienestar Animal; al 1 de diciembre de 2023, existe una omisión al Artículo Quinto Transitorio de la Ley de Bienestar Animal, por 275 días. 

Ya que una de las facultades de dicho Consejo, es supervisar a los Ayuntamientos en la expedición de sus reglamentos municipales en materia de bienestar animal. Y así, de manera conjunta, trabajen en acciones los gobiernos municipales y el estatal, como lo son: registro e identificación de perros y gatos, promoción de la tutela responsable de animales de compañía, control reproductivo, restitución y adopción, acceso a atención veterinaria, educación que promueva interacciones seguras humano-animal.

Respecto al trabajo de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), la evaluación señala que el personal de esta dependencia, debe recibir capacitación por expertos en materia de crueldad cometida en contra de los animales. 

Hasta el momento, el único curso de capacitación que han recibido, fue impartido por personal de la propia Procuraduría. Un dato a considerar, es que en la Ciudad de México, pese a que desde el año 2014 el maltrato animal es delito, en la última medición que realizó la organización hispanoamericana AnimaNaturalis, en su Atlas del Maltrato Animal, arrojó que en el año 2019, solo un 2.4 % de las carpetas de investigación culminaron con sentencias condenatorias, con la aplicación de la pena en libertad y de las que no hay registro de sanciones económicas. 

La evaluación completa, se puede consultar a través de la dirección web: https://acrobat.adobe.com/link/review?uri=urn:aaid:scds:US:b8970baa-d148-3dea-ae3c-8c9e86f25d8e