Un video que las propias trabajadoras del Hospital Regional de Apizaco han enviado a medios de comunicación da cuenta de que la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, escuchó de viva voz del personal de la salud, las carencias de material, insumo y personal, entre otras cosas, que hay en las unidades médicas de Tlaxcala.
Recordar que la semana pasada, trabajadores y trabajadoras afiliadas a la Sección 27 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) marcharon y se manifestaron en la capital del estado, para exigir al gobierno del estado que se atiendan las necesidades que enfrentan para dar servicios de salud a la población en general.
Días previos a esta movilización, la gobernadora declaró, ante medios de comunicación que está abierta al diálogo, pero rechazó que los trabajadores se manifiesten en sus centros de trabajo; además, la secretaria general del sindicato de trabajadores, Blanca Águila Lima, señaló que en el gobierno del estado hay “cerrazón” para entablar mesas de trabajo y solucionen las problemáticas que enfrentan.
En el video que circula y que fue tomado por las propias trabajadoras, le expusieron que en el Hospital Regional de Apizaco “estamos trabajando con focos, necesitamos lámparas lámparas de quirófano, máquinas de anestesia, instrumental, además todos los consumibles están muy mal y no podemos trabajar así”.
Le señalaron que también necesitan un software para densitometría, “porque la máquina no funciona por la actualización que hace falta”, a todas las demandas la gobernadora Lorena Cuéllar tomó nota.
También le dijeron que en ese hospital sólo hay 21 suplentes de enfermería “cuando son más de 800 trabajadores”, ante esa demanda, Cuéllar Cisneros cuestionó: “¿pero tenían mil cien personas aquí, dónde están?, “aquí no”, respondieron las trabajadoras, quienes también le señalaron que son las mujeres la fuerza de trabajo.
Además le mencionaron que a esas 21 suplentes de enfermería “las matan, porque las ponen a trabajar en varias áreas a la vez, pasan más de 48 horas laborando”, señalaron.
Una de las enfermeras le dijo a la gobernadora: “salimos a las calles a pedir ayuda, no tome represalias, por favor”, a lo que la mandataria se limitó a decir “no lo vamos a tomar”.
Las trabajadoras señalaron la necesidad de que la población conozca la realidad de lo que viven en sus centros de trabajo en todo el estado.