A través de un comunicado, el personal del Albergue La Sagrada Familia, de Apizaco criticó que el gobierno federal criminaliza y revictimiza a los 39 migrantes que murieron calcinados en un centro de detención en Ciudad Juárez, Chihuahua, y a los más de 29 que resultaron heridos.
Lamentó profundamente los hechos ocurridos en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración de esa ciudad, pues “los hechos son muestra dolorosa e indignante del trato indolente y violento que, la autoridad migratoria, brinda a las personas migrantes y refugiadas operativos de detención.
Señaló el uso excesivo de la fuerza, trato inhumano y humillante, violaciones a derechos humanos, agresiones y violencia dentro de estos centros de detención, mal llamados por el presidente de la República, albergues, “se practican actos inhumanos vejaciones y diversas violaciones a derechos humanos que atentan contra la dignidad y la vida de las personas”.
Refirió que como albergue que atiende personas migrantes rechazan la criminalización y revictimización que ha realizado el gobierno de México, al señalar y culpabilizar a las personas detenidas de haber provocado los hechos, sino por el contrario, exigimos una pronta investigación y castigo a quién o quiénes resulten responsables por la omisión de cuidados al tener alcance insumos para provocar el incendio.
Responsabilizó al estado mexicano, particularmente al Instituto Nacional de Migración (INM), por la falta de protocolos ante lo sucedido y pidió frenar ese tipo de acciones de control migratorio y de privación de la libertad que violentan y transgreden los derechos de las personas.
Por tal razón, exigió al Estado Mexicano que se investiguen los hechos, se conozca la verdad y se juzgue conforme a derecho, así como la inmediata separación del cargo de los altos funcionarios del INM y se les finque responsabilidades, por los actos de omisión cometidos que provocaron este crimen así como de todos los funcionarios que resulten responsables.
También exigieron a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) su propia actuación e investigación y, el cumplimiento de su objeto, que es la protección de Derechos Humanos, sin dejar a un lado a las personas en contexto de migración que se encuentran en tránsito por nuestro país.